Haz más con menos

Seguro que puedes conseguir más impacto en tu salud, en tu trabajo o los demás con menos acciones.

Puede ser tan fácil como quitarte una de las distracciones que tengas en tu agenda y sacar tiempo para conectar contigo mismo/a o dedicárselo a ese proyecto en el que estás poniendo tu alma pero para el que no tienes todas las horas que te gustaría.

Si no tienes proyecto aún, simplemente disfruta de un poco más de espacio para respirar, para no hacer nada.

De ese vacío pueden salir luego muy buenas ideas.

Cancela eventos de tu calendario

Si tienes compromisos en la agenda, revisa si puedes cancelar alguno e invertir ese tiempo en alguna tarea que pueda reportarte mayor impacto o productividad en algún área prioritaria de tu vida en este momento (puede ser salud, trabajo, ocio… Tú eliges).

Di no a lo de fuera para decirte sí a ti.

Cancela alguna reunión o café con alguien y vete a dar un paseo o al gimnasio.

Duplica el tiempo disponible para las tareas importantes del día

Crea espacios libres en tu agenda para poder ampliar el tiempo dedicado para cada tarea restante, como si fuera un collar de cuentas al que le quitas algunas para que haya más espacio entre bola y bola y no ahogue tanto.

O para no llegar 15 minutos tarde a lo siguiente.

Vé al grano con los emails

También puede significar reducir la longitud de los emails que redactas en el trabajo. Ir más al grano.

Hola Paquita,

Pim.

Pam.

Pum.

Adiós.

No te justifiques tanto

Tu tiempo es oro. Irse por las ramas puede ser contraproducente. Cuando hables con alguien, no te justifiques ni des mil vueltas para explicar las cosas.

Es lo que hay, y punto.

Si tu opinión asertiva no es bien recibida, lo tendrán que gestionar ellos, no tú.

No estás aquí para complacer a nadie.

***

Haz más con menos.

Quizá encuentres de esta manera el espacio para poner el foco en lo que realmente te importa.

¿Por dónde puedes empezar a meter la tijera?

Fotografía de Daniel Vázquez