Preocuparme por mi futuro siempre ha sido una prioridad para mí, allá donde fuera. Incontables horas de formaciones, terapia y experiencias vivenciales me han hecho ver que mi futuro tiene poco sentido si no me ocupo de mi presente.
He aquí propuestas en 2 itinerarios para aumentar el foco en lo importante del día a día: quedarse con lo esencial y vivir despacio
Preocuparme por mi futuro siempre ha sido una prioridad para mí, allá donde fuera. Incontables horas de formaciones, terapia y experiencias vivenciales me han hecho ver que mi futuro tiene poco sentido si no me ocupo de mi presente.
Limpiar el videoclub, esa actividad que me introdujo en el minimalismo o en la aventura de «vivir más cerquita de lo esencial».
Empecé hace un tiempo a plantearme liberar unas estanterías de mi casa de un montón de DVD’s, blu-rays y videojuegos. Mi estrategia sería conservar los de valor emocional, vender los de valor económico, regalar los que a alguien le hicieran ilusión y tirar el resto. Os voy a contar cómo conseguí dejar las estanterías casi vacías, y la felicidad mental que me ha generado.